SOLDADURA CON METALES DE APORTACIÓN - Definición - Significado

Es una técnica de soldadura heterogénea, puesto que realiza la unión entre dos piezas mediante un material de aportación fundido a una temperatura inferior a la de los materiales que se desea unir. Respecto a la soldadura *autógena, que se realiza por fusión del metal base y, por consiguiente, a temperaturas más elevadas, ofrece la ventaja de que no se altera la estructura del metal en la zona de unión, ni tampoco se crean sobretensiones locales debidas al salto térmico (para efectuar una soldadura de ese tipo es preciso calentar uniformemente las piezas).

La soldadura con metales de aportación es una técnica que siempre ha estado muy difundida por sus aplicaciones prácticas. Existen aleaciones soldables mediante las cuales es posible obtener soldaduras perfectas usando un sencillo soplete de gas: las temperaturas necesarias para la soldadura varían en general desde 160 hasta 700 °C, según la aleación empleada.

En los últimos 50 años la técnica de la soldadura ha permanecido inalterada, mientras que se consiguieron grandes progresos en el estudio de las aleaciones soldables utilizadas como metal de aportación, resultando posible efectuar soldaduras a temperaturas cada vez más bajas (con las ventajas ya descritas y con la posibilidad de evitar cualquier daño a eventuales elementos montados sobre la pieza que se desea soldar y no resistentes al calor), e incluso realizar aquellas que hasta hace muy pocos años eran muy difíciles (aluminio sobre aluminio) o imposibles (aluminio sobre cobre).

Las soldaduras se pueden subdividir en:

- Soldadura resistente, denominada así porque requiere preparaciones similares a las de la soldadura por fusión, con el uso de cordones que se depositan más firmemente sobre el metal de base por efecto del baño.

- Soldadura propiamente dicha o soldadura capilar, así conocida porque entre las piezas que se desea unir debe dejarse una fisura capilar (de pocas décimas de milímetro), en la cual la aleación soldable penetra por capila^ ridad, siempre que se cumplan las condiciones necesarias del baño.

La soldadura resistente y la soldadura capilar pueden ser:

- blandas, cuando se usan metales de aportación con temperatura de fusión <450 °C;

- duras, cuando se utilizan metales de aportación con temperatura de fusión >450 °C.

Puede decirse que cerca de los 900 °C ya constituyen verdaderas soldaduras.

Las aleaciones para las soldaduras duras son a base de cobre (cobre, cobre-fósforo, cobre-cinc), níquel, aluminio, plata u otros metales preciosos. Para las soldaduras blandas se utilizan aleaciones a base de cinc, indio, estaño, plomo, etc. Son muy conocidas las aleaciones Castolin, catalogadas en un nivel intermedio entre las categorías apuntadas. Las aleaciones vienen presentadas en forma de varillas, hilos, láminas, polvos y pastas.

Las operaciones de soldadura, salvo casos particulares, requieren el empleo de desoxidantes adecuados, o bien de determinadas atmósferas controladas. La misión de ambos es sobre todo eliminar los óxidos y otros componentes cuya presencia obstaculice el ligamento entre el metal de aportación y el metal base; además de proteger los dos metales contra la oxidación por parte del aire en el transcurso del calentamiento y de la soldadura. De ordinario, los desoxidantes son incorporados en el revestimiento de la varilla, o bien esparcidos con un pincel sobre las piezas, antes de iniciar la soldadura.

El desoxidante debe ser activo a una temperatura inferior al punto de fusión de la aleación soldable; además, se deberá poner la máxima atención en evitar algún sobrecalentamiento, porque el desoxidante se deteriora y se carboniza, perjudicando la resistencia de la unión.

Para las soldaduras blandas sobre acero se usa una mezcla de 71 % de cloruro de cinc y 39 % de cloruro sódico. El bórax es un desoxidante muy adecuado para las soldaduras duras por encima de 700 °C.

Con aleaciones de plata (temperatura de fusión 600 °C) se pueden soldar las aleaciones de cobre y hierro, los aceros inoxidables, el níquel y sus aleaciones, planchas de acero rápido o sinterizadas en carburo de volframio.

Es posible soldar también el aluminio y sus aleaciones, puesto que no contienen elevados porcentajes de magnesio (metal de aportación: aleación de aluminio o silicio); aceros y fundición maleable (metal de aportación: aleación a base de cobre, niquel, cinc); zamak (material de aportación: aleación de cinc).

En los automóviles la soldadura (dura) es esencialmente usada para realizar uniones con buenas características estéticas sin necesidad de operaciones de refinado en los elementos de carrocería para los que no se requieren resistencias elevadas o solicitaciones demasiado fuertes. En producciones de serie se sueldan (con aleaciones de cobre: latones y cobre-plata), por ejemplo, los montantes traseros del techo, los bastidores de las puertas, las cornisas de las ventanillas laterales y, en general, las uniones de la carrocería donde, por motivos estéticos, no se pueden utilizar otros procedimientos de soldadura.

Una operación particular de soldadura es el estañado, o sea una soldadura de relleno usada comúnmente para ocultar las uniones de la chapa exterior de la carrocería. Ésta es una soldadura blanda y requiere gran atención, porque necesita una buena adhesión de la aleación con la superficie de la chapa. Sin embargo, el estañado es una operación de recurso que deberá ser evitada lo más posible, puesto que en el caso de la cocción en el horno antes del pintado, o también con el tiempo, puede originar blistering.

Pasando a los elementos de la mecánica, la soldadura es empleada para los brazos de las suspensiones, para las horquillas del cambio y para fijar algunos engranajes del cambio; en general, en todos estos casos se trata de uniones del tipo duro que precisan previamente un calentamiento en el horno o por inducción.

En el sector de los elementos accesorios se aplica ampliamente, con aleaciones al estaño, en la construcción de los radiadores y de los depósitos de expansión del líquido de refrigeración, en las uniones de la boca de carga de combustible y en las uniones de los tubos de paso de gasolina. Otro ejemplo de empleo es el previsto en las uniones de los tubos del sistema de frenado.

En los servicios de reparaciones, además de soldaduras sobre la carrocería, radiadores, etc., se pueden reparar bloques Asurados, carburadores agrietados, etc. Es importante saber que casi todos los materiales pueden ser soldables; naturalmente, cada tipo de aplicación requiere una elección cuidadosa de la aleación soldable y en este sentido resultan de gran ayuda los consejos que los fabricantes de la aleación indican a los usuarios.