Vocablo inglés que indica una particular disposición de la suspensión para reducir o corregir el descenso de la parte delantera del coche durante el frenado, debido a la posición del baricentro que, por hallarse encima del plano de la calzada, provoca un par de rotación hacia delante produciendo el cabeceo.
El descenso de la delantera del coche (dive es una voz inglesa aplicada inicialmente para indicar el «picado» de una aeronave) es un problema bastante reciente, ya que en los automóviles antiguos, con suspensiones rígidas y marcha lenta, no se observaba este fenómeno. Los sistemas adoptados para corregir este inconveniente aprovechan generalmente las reacciones de las ruedas durante el frenado, procediendo de forma que el par de fuerzas que tiende a arrastrar la pinza de los frenos o el plato portamordazas actúe sobre los brazos de la suspensión provocando la elevación de la parte delantera manteniendo al mismo tiempo anclada, es decir baja, la parte trasera del coche. Todo ello se consigue estudiando la configuración geométrica de las suspensiones delantera y trasera y, como el par frenante es proporcional a la intensidad del frenado, también su efecto corrector lo será.
Otra forma de reducir el «dive» es la de bajar el baricentro hasta aproximarlo lo más posible al plano de la calzada, pero poco se puede hacer en este sentido en los coches actuales, ya de por sí muy bajos, sin causar mayores y más graves problemas en su tamaño y habitabilidad. Conviene advertir que la corrección de este inconveniente, en la forma que sea, no modifica el aumento de carga en el tren delantero que, siendo función solamente de la posición del baricentro y de la batalla, debe permanecer constante. (*Cabeceo, *Antilift.)