Estructura complementaria que forma parte de la carrocería auto-portante, es decir del sistema que tiene la función de resistir las solicitaciones de flexión y torsión. Puede estar constituido por un pequeño bastidor auxiliar delantero o trasero, o bien, por un bastidor más grande de tipo perimetral, es decir, colocado sobre el perímetro del piso.
En los vehículos normales, el falso bastidor es una solución técnica típicamente norteamericana. Las carrocerías de los vehículos GM, Ford, etc., son en realidad semicarro-cerías cuyas estructuras se complementan cuando están acompañadas por un falso bastidor perimetral, de piezas con sección abierta o cerrada que soportan toda la mecánica (suspensiones delanteras, grupo motopropulsor, transmisión, puente y suspensiones traseras) como en el Ford Mercury; o bien, por un bastidor auxiliar anterior que soporta el grupo mecánico delantero (Chevrolet Cámaro).
La producción europea no emplea dicho tipo de construcción, pero recurre a estructuras delanteras y traseras (Mini Minor y Citroen GS) que pueden considerarse falsos bastidores. Los falsos bastidores se fijan en este caso a la carrocería mediante tornillos, previa interposición de elementos elásticos que evitan la resonancia de las vibraciones.
En el terreno deportivo se recuerda, como primer ejemplo de falso bastidor, la estructura tubular múltiple de sección cuadrada, que completaba en la parte delantera la carrocería monocasco del Jaguar D (1955).
Se emplean también falsos bastidores en los vehículos de Fórmula 1, tanto en forma de bastidores de soporte del grupo de la suspensión delantera (Lotus de Fórmula 2) como formando complemento de la estructura trasera (BRM 160 P).