Término del argot automovilístico que indica la maniobra errónea de poner el motor a un número de revoluciones notablemente superior al necesario. Dicho inconveniente, debido muchas veces a la inexperiencia de conducción, se produce principalmente en la salida.
Puesto que una velocidad de rotación excesiva del motor (designada con la expresiones salida de vueltas o pasada de revoluciones) puede perjudicar los órganos mecánicos solicitados, algunos vehículos (Porsche 911) se hallan equipados con un limitador de revoluciones que interrumpe el encendido del motor.