Marca de Detroit creada en 1914 sobre las bases de la anterior sociedad Rocket-Batterman & Booth, que desde el año anterior construía cyclecars bicilíndricos, que luego reaparecieron con la nueva marca. El titular de la empresa era James Scripps Booth, ya conocido en el sector automovilístico norteamericano por haber construido en 1908, cuando solamente tenía 20 años, un interesante ejemplar de automóvil giroscópico equipado con un motor V8 y denominado Bi-Autogo. Esta tentativa no tuvo continuación y el joven ingeniero prefirió dedicarse a la fabricación de automóviles comunes de 4 ruedas.
Además de los cyclecars, la marca de Detroit construyó automóviles de turismo tales como el modelo C de 1914, accionado por un motor de 4 cilindros con válvulas en cabeza, de 25 CV, que en 1916 fue substituido por el modelo D con motor V8, disponible con 3 carrocerías.
Los niveles de producción de la Scripps Booth fueron siempre muy bajos y en 1917 la empresa entró a formar parte de la General Motors, permaneciendo hasta 1923. Sin embargo, los últimos modelos fueron prácticamente el resultado del montaje de componentes suministrados por otras empresas del grupo (Chevrolet y Oakland) y no despertaron interés alguno.