Tipo de carrocería de entrada por la parte trasera, que se empleó en los primeros tiempos del automóvil cuando la pequeña distancia entre ejes y la presencia de la transmisión por cadena no permitían la entrada lateral a los asientos traseros.
Este término francés, como otros muchos tomados de la nomenclatura de los diferentes tipos de coches de caballos, deriva de un vehículo de 2 ruedas, utilizado a principios de siglo, arrastrado por un caballo y cerrado por sus 4 lados, por lo que se parecía vagamente a un tonel (tonneau en francés). A lo largo de sus bordes laterales se hallaban situadas 2 banquetas vis-á-vis para 4 personas, incluido el conductor, que podía sentarse a la derecha o a la izquierda. En los automóviles, este tipo de habitáculo iba situado detrás de 2 asientos delanteros, destinados al conductor y a los equipajes y orientados en el sentido de la marcha. Un tercer asiento, auxiliar y abatible, iba colocado en el interior de la puerta trasera de acceso.