J. Gurney Nutting fundó la fábrica de carrocerías del mismo nombre en 1919 en los locales de la Marlborough Carriage Works, de Croydon. A finales de aquel primer año de actividad, la empresa ya expuso 3 coches en el Salón de Londres: un Charron 18/24 HP landaulette, un Austin 20 HP coupé de 2 plazas y un Paige en versión berlina.
En 1923, un incendio destruyó los talleres de Croydon, y la empresa se trasladó a Chelsea, a Elystan Street. El éxito de un logrado sedán de ciudad sobre bastidor Rolls Royce proporcionó a la marca británica numerosos encargos por parte de una clientela selecta, entre la cual figuraban incluso los hijos del rey Jorge V.
Entre 1924 y 1929, la Gurney Nutting construyó numerosas carrocerías de tipo Weymann, empleando preferentemente chasis Bentley. En cualquier caso, durante dicho período presentó en los Salones londinenses varias realizaciones sobre bastidores de otras marcas europeas, como Bianchi, Hispano-Suiza, ítala, Sunbeam y Lancia.
En 1929, la empresa se trasladó a una sede más amplia situada en Lacland Place, también en Chelsea. En ella se construyó en 1931 el famoso automóvil de récord de Malcolm Campbell, el Bluebird, para el que se emplearon unos 54 m2 de paneles de aluminio y un bastidor de tubos de acero.
Durante los años treinta, la fábrica británica comenzó a dotar sus automóviles con gran número de accesorios originales y lujosos. Un ejemplo de ello fue el Bentley de 4,2 1, de 1938, provisto, entre otras cosas, de un soporte para palos de golf, un conjunto de maletas de cuero, calefacción, radio y desempa-ñador.
Sin embargo, la Gurney Nutting no consiguió superar los años difíciles de la segunda guerra mundial y, en 1945, fue adquirida por la Jack Barcley Ltd.