REGULADOR - Definición - Significado

Dispositivo que, en el circuito electrónico de un vehículo, mantiene la tensión suministrada por el generador lo más constante posible y regula la intensidad de la corriente en función de las condiciones de carga de la batería. Muchas veces, con esta expresión de regulador se indica todo el conjunto, que comprende el interruptor de mínima, el regulador propiamente dicho y el limitador de tensión.

En un automóvil, la corriente de recarga de la batería es suministrada por una dinamo o por un alternador que están unidos directamente al motopropulsor (excepto en algunos coches de carreras, en los cuales la toma de movimiento está en el cambio de velocidades) y, por tanto, la velocidad de arrastre está sujeta a amplias y continuas variaciones según la rotación del motor.

Puesto que para cualquier tipo de generador existe una proporcionalidad entre velocidad de rotación e intensidad de corriente producida, aparecen continuas variaciones de esta última durante la marcha del vehículo. También se producen variaciones de la solicitud de energía según que los accesorios (luces, ventilador eléctrico, limpiaparabri-sas, luneta térmica, etc.) funcionen o no.

Por consiguiente, es necesario un dispositivo que nivele la tensión en el circuito haciéndola independiente del régimen de rotación del generador, y de la solicitud de corriente por la batería y los aparatos utilizadores. Puesto que la tensión en los bornes del generador es igual al producto del flujo por la velocidad de rotación, dicha regulación se efectúa disminuyendo adecuadamente la corriente de excitación del generador con sistemas electromagnéticos o electrónicos.

Los primeros consisten en un dispositivo de contactos vibratorios, denominado tipo Tirril; éste se encarga de conectar o desconectar alternativamente una resistencia, en serie con el circuito de excitación, en función de la tensión producida por el generador. Generalmente, existe también un tercer contacto capaz de cortocircuitar la corriente de excitación y anular por un instante la corriente producida. Lógicamente, este contacto entra en función sólo a velocidades de rotación del motor muy altas.

Además de nivelar la tensión, el regulador carga la batería teniendo en cuenta su estado: es necesario que produzca una mayor intensidad de corriente cuando la batería esté descargada y que la limite cuando esté próxima a la saturación (para evitar la ebullición del ácido). Puesto que a diferentes condiciones de carga de la batería corresponden tensiones diferentes de cada uno de los elementos (desde 1,8 V con batería descargada a 3,7 V con batería cargada), el regulador está dotado de una bobina amperimétrica (denominada así porque trabaja en función de la intensidad de la corriente) que actúa sobre el propio interruptor de contactos alternativos, modificando (de manera leve pero suficiente) la tensión que sale del generador en función de la absorción (intensidad de corriente que entra en la batería), es decir del estado de carga de esta última.

En la práctica, cuando la batería está descargada, la tensión suministrada puede ser más baja, pero la intensidad debe ser elevada. Por el contrario, cuando la batería está cargada, la tensión debe subir hasta valores muy altos y esto reduce automáticamente la intensidad de corriente producida.

Los reguladores electrónicos, empleados generalmente en los alternadores, utilizan, exclusivamente o en parte, componentes electrónicos o semiconductores (transistores, diodos) y tienen la ventaja de poseer dimensiones y pesos muy pequeños, insensibilidad a las vibraciones y, en algunos casos, compensación automática en función de la temperatura.

En los circuitos eléctricos alimentados por volante de imanes permanentes, la regulación se produce por medio de un sistema electrónico denominado de reactores saturables, o bien, de un diodo de Zener conectado en paralelo con el circuito de recarga.