Un motor se dice que es elástico cuando su par aumenta al disminuir el régimen de rotación; de esta forma, frente a las mayores resistencias que el vehículo encuentra en una subida, el motor puede oponer un par cada vez mayor a medida que la velocidad va disminuyendo. Esto permite viajar en condiciones variables sin cambiar frecuentemente de marcha.
Para los motores de combustión interna, la condición de elasticidad tal como se ha definido tan sólo se tiene por encima de cierta velocidad de rotación (régimen de par máximo).
Para su empleo corriente, es útil que el arco de utilización del motor sea lo más amplio posible y, por tanto, sea máxima la relación entre el régimen de máxima potencia nw y el de par máximo np y que, además, sea máxima la relación entre el par máximo Pmtíí y el par Pw a la velocidad de máxima potencia nw. Por ello, se define un índice de elasticidad que da una idea, aunque no siempre exacta, de la elasticidad de un motor.
Cuanto más elevado es el índice de elasticidad, mayor resulta la capacidad de aceleración de un motor, partiendo de un número de revoluciones reducido. Un juicio más completo tan sólo puede emitirse examinando la forma de la curva de par.
Para hacer más elástico un motor es preciso desplazar hacia los regímenes bajos el rendimiento volumétrico máximo y, en general, disminuir las dimensiones de los conductos de admisión, reducir el cruce del diagrama de distribución, comprobando el perfil de las levas, revisar las longitudes de los colectores y poner a punto nuevamente el encendido y la carburación. Es preciso observar que actuando de esta forma queda reducida la potencia máxima del motor.